Semana 0

Hola,


He decido escribirte una especie de diario para ir contándote mis vivencias en esta tierra lejana y mantenerte al tanto de cómo estoy y qué hago. Espero no desanimarme en el camino.


Me siento muy feliz, no por irme de Santo Domingo, sino porque, al partir, me di cuenta de lo amado que soy de mi familia y mis amigos. La verdad es que me sorprendió ver tantas muestras de cariño. Eso me hizo fuerte y dejo saber que hay personas que esperan por mi y que comparten mis alegrías y mis logros.


Las despedidas te hacen fuerte.


En el aeropuerto, cuando pase los Rayos X, antes de migración, decidieron revisar mi bulto de mano por si tenía algún líquido o producto que no podía pasar. Naturalmente no llevaba nada prohibido, sin embargo, a la oficial que le encargaron la revisión le resultó curioso que yo, un muchacho tan joven, llevara en mi bulto una biblia. Me preguntó qué era, la abrió, la hojeó y luego me dice: <<disfrútala, ojalá yo poder tener una>>, a eso le respondí <<pero claro que tienes una, si ya tu biblia la tienes en tus manos, es esa!>>. No puedo explicar la mirada y la sonrisa de felicidad que me regala. Vi a Dios en sus ojos. Y es que desde antes de salir de Santo Domingo, ya estaba siendo instrumento de Dios.


El vuelo estuvo muy bien. Fue tan largo como me lo esperaba, pero fue soportable. Me tocó de compañera una señora llamada Janet. Mi alegría fue cuando ella me comento que es católica y que pertenece a una comunidad de adultos de la Parroquia Santísima Trinidad. Ya se imaginarán las conversaciones interminables que tuvimos.


A mi llegada a Madrid, después de compartir con unos <<doñitos>> argentinos super simpáticos; me encontré a Tia Teresa, que es con quien me estoy quedando. Se puso muy contenta de verme. Me han tratado como a un príncipe, con muchas atenciones y cuidado. No me puedo quejar de nada.


Entre el domingo y el lunes he podido conocer casi todo Madrid: el palacio real, la catedral, Gran Via, Puerta del Sol, Parque El Retiro, ufff como dicen aqui <<Madre Mia!!!>> jejeje. La ciudad es hermosa, muy limpia y la arquitectura es extraordinaria. 


También he avanzado los pendientes que he tenido de esta semana: saque mi linea móvil (abajo está el número), saque la cuenta bancaria para los depósitos (manden los chelitos que esto es caro jejeje), fui a la universidad a llenar las fichas de inscripción y visitar la Facultad, me reuní con algunos compañeros interesados en alquilar piso, ahora voy saliendo a visitar algunos pisos para ver cual alquilo. 


En fin, todo esta en el orden que Dios lo ha puesto. Te extraño mucho y quiero que estés feliz por mi.


Ya el lunes inicio las clases del martes a las 05:00 pm (hora Madrid). Estoy muy emocionado, todo es nuevo.


Me preocupa un poco el asunto económico, porque para iniciar hay muuuchos gastos. Pero nada me turba, #DCYoCreo en un Dios de providencia. Ahora mismo no hay dinero para muchas cosas que tengo que hacer, pero se que ya Dios tiene la solución. Definitivamente estoy viviendo un milagro que Dios va haciendo día a día.


Espero que no te desanimes. Ten fe yo como tengo fe. Dios está contigo. 


Ora por mi!


Bendición y paz,


Carlos.